Trabajadores de Continental Rubí (Barcelona) producen material sanitario
La solidaridad que ha despertado la crisis sanitaria del coronavirus está superando todas las fronteras. Se ha colado en un número creciente de empresas y trabajadores que han decidido pasar a la acción para ayudar al personal sanitario en la lucha contra el virus. Incluso en las situaciones más complicadas, como las de la plantilla de la fábrica de Continental de Rubí, que sufren el parón con un ERTE y que, además, están a la expectativa de conocer si mantendrán sus puestos de trabajo debido al proceso de venta o cierre en marcha.
En ese clima de gran incertidumbre sobre el futuro de sus puestos de trabajo, un grupo de trabajadores han seguido la tendencia que se ha extendiendo en muchas empresas industriales de convertirse en proveedores de material sanitario para los hospitales. La idea corrió como la pólvora entre la plantilla de la división de plásticos y la de electrónica y llegó incluso a la sede central del grupo en Alemania.
Finalmente, el proyecto espontáneo se convirtió en un reto colaborativo en el que todos aportaban sus conocimientos, materiales, maquinaria o tiempo para imprimir pantallas protectoras que cubren todo el rostro del personal médico y de enfermería. Han puesto a funcionar impresoras 3D de la empresa y en domicilios particulares para imprimir el soporte principal que se ajusta a la cabeza y en el que se engancha la pantalla protectora de plástico.